Exposición única de la obra de Rembrandt en Praga

En el lindo edificio de estilo rococó del palacio Kinský, ubicado en la Plaza de la Ciudad Vieja en la capital checa, se lleva a cabo una exposición excepcional denominada Rembrandt: El retrato de un hombre. Su inauguración fue planeada para la primavera de este año, sin embargo, por la pandemia se aplazó y finalmente se celebró el 25 de septiembre. Desafortunadamente, la exposición duró abierta tan solo dos semanas hasta que, por el creciente número de contagiados, las instituciones culturales tuvieron que cerrar sus puertas otra vez. Dado que este proyecto se estaba preparando durante varios años, en noviembre la Galería Nacional de Praga decidió preparar una versión virtual de la exposición, incluyendo un recorrido en 3D. Los vídeos fueron publicados en las redes sociales de la Galería. Y en estos días, el público general tiene otra vez la posibilidad de adentrarse en el mundo del arte de este célebre pintor y grabador neerlandés visitando el palacio Kinský en Praga.

Nunca antes los amantes del arte pudieron ver en el país tal cantidad de destacadas piezas artísticas de Rembrandt y sus seguidores. Según los organizadores, un evento de importancia similar probablemente no se repetirá en décadas. En total, se exhiben diez pinturas y más de 50 trabajos en papel de Rembrandt, siendo la imagen central y principal el cuadro denominado El erudito en la sala de estudio, del año 1634. Es el único cuadro del pintor que existe en la República Checa, y habitualmente forma parte de la exposición permanente denominada Maestros antiguos en el palacio de Schwarzenberg en Praga.

La obra de Rembrandt se destaca por su poder de meterse por debajo de las cosas y captar el espíritu humano, presentar no solo la apariencia física de alguien, sino sus sentimientos y el dramatismo de su vida interior que queda reflejada en la expresión. Los personajes retratados miran a sus espectadores, están como vivos.

Durante el recorrido los visitantes pueden conocer la trayectoria del pintor, es decir, pasar por tiempos en que comenzó hasta sus años más célebres y la producción posterior de obras de madurez y el dominio de la luz y el color. La muestra incluye también los dibujos y gráficas del pintor que fueron muy valuados ya durante su vida. De hecho, dado que Rembrandt nunca abandonó su país natal, en el exterior fue más conocido como un gráfico. Hasta ganó bastante dinero publicando una serie de sus gráficas en altas cantidades. En general, su obra incluye retratos, especialmente autorretratos, pero también paisajes y cuadros con temas mitológicos y bíblicos.

A la vez, la exposición pretende mostrar la huella y la influencia de Rembrandt en el mundo actual. Por tal razón, es posible observar también cuadros de sus seguidores y artistas contemporáneos que interpretan de maneras distintas y modernas su obra. Entre ellos, se encuentran piezas de Jan Lievens, Gerrit Dou, Ferdinand Bol, Govaert Flinck o Christopher Paudiss.

La Galería Nacional de Praga realiza este proyecto en cooperación con Wallraf-Richartz-Museum de Colonia sobre el Rin para conmemorar el aniversario de 350 años desde la muerte del pintor (1606 Leiden – 1669 Ámsterdam). Diferentes museos prestaron algunas piezas para el evento. Se trata, por ejemplo, del Museo Metropolitano de Nueva York, la Galería Nacional de Londres, el Museo del Prado de Madrid, el Museo Rijksmuseum de Ámsterdam y el Albertino de Viena, pero también aparecen obras de colecciones privadas. La exposición finalizará el 31 de enero de 2021 y no se podrá ampliar.

Más información sobre la exposición encontrarán en la página web de la Galería Nacional de Praga aquí.

Otras fuentes: Kulturio.czViviendoPraga.com, NuevoPeriodico.com, Irozhlas.cz. Foto 1-3.