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El lúpulo y la ciudad de Zatec en la lista de la UNESCO

Žatec, una pequeña ciudad ubicada en la hermosa región de Bohemia Occidental en la República Checa, es conocida por su rica tradición en la producción de lúpulo de alta calidad. Este patrimonio único se ha mantenido durante siglos y ha convertido a Žatec en un lugar icónico para los amantes de la cerveza en todo el mundo. Ahora, Žatec está dando un paso importante para preservar su legado al ser inscrito como Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.

La incorporación de la ciudad y el paisaje colindante a la lista de la UNESCO fue anunciada por el Comité del Patrimonio Mundial el lunes 18 de septiembre en Riad, Arabia Saudita, tras haber estudiado 50 nominaciones del mundo entero. Las autoridades de Žatec duraron unos 16 años intentando conseguir la inscripción a la lista. Se trata de la décimo séptima inscripción entre los monumentos culturales o zonas naturales de Chequia en el Patrimonio Mundial de la UNESCO. A la vez, es la primera zona de lúpulo del mundo que obtuvo ese estatuto.

El paisaje que rodea Žatec es una obra maestra de la agricultura y la cultura checas. Miles de hileras de plantas de lúpulo se extienden sobre colinas suavemente onduladas, creando un paisaje extraordinario. Cuenta la historia de generaciones de agricultores que han cultivado el lúpulo aquí por más de 700 años, preservando técnicas tradicionales. El lúpulo es una de las materias primas cruciales para la fabricación de la cerveza. En la región de Žatec se cultiva en más de 3740 hectáreas, que es el 77% de todas las áreas a nivel del país. Se destaca por ser el lúpulo aromático más suave del mundo.

La inscripción en la lista de la UNESCO está dividida en dos partes. En primer lugar, está la zona histórica de la ciudad con su barrio industrial del siglo XIX, que dispone de la mayor concentración de edificios vinculados con el procesamiento y la comercialización del lúpulo. Entre ellos figuran la antigua fábrica de malta renacentista con fachada neogótica y una galería de arte en su interior, o la Plaza del Lúpulo con su valioso almacén de lúpulo. También destacan el conjunto de edificios convertidos en un moderno museo del lúpulo y el Templo del Lúpulo y la Cerveza, con un reloj astronómico y una torre mirador llamada el Faro del Lúpulo.

Lejos del centro de la ciudad se alza la gran fábrica de cerveza roja y blanca, mezcla de modernismo e historicismo. Otro notable edificio industrial de principios del siglo XX es el secadero de lúpulo de Trnovany. En el centro de la zona de conservación se encuentra el huerto de lúpulo más pequeño del mundo, pero también la Columna de la Peste de la Santísima Trinidad y el ayuntamiento con su torre dominante. Los visitantes pueden admirar decenas de casas adosadas con orígenes que van desde la Edad Media hasta el Barroco, varias iglesias y parte de las fortificaciones de la ciudad que se han conservado hasta la actualidad.

En segundo lugar se cuenta con la zona de lúpulo de Žatec, sus plantaciones y los pueblos de Trnovany y Stekník, con edificios que servían para secar el lúpulo, su embalaje y almacenamiento. Están incluidas las granjas de lúpulo, las cervecerías, las malterías y el palacio de Stekník en el cual antiguamente vivían los propietarios de las plantaciones locales. Data del Alto Barroco con decoración rococó y destaca sobre todo por su gran jardín en terrazas de estilo italiano, único en la República Checa.

La inscripción en la lista de la UNESCO, sin menor duda, ayudará a promover el turismo sostenible en la región y garantizará la preservación de estas tradiciones para las generaciones futuras. Dado que se espera una mayor afluencia de turistas, la Alcaldía de la ciudad quiere centrarse en el desarrollo de las infraestructuras, edificar aparcamientos, marcar rutas para los turistas y hacer accesibles al público general senderos en los lugares de cultivo de lúpulo locales.

Fuentes: Espanol.radio.cz, SeznamZpravy.cz, Novinky.cz. Foto 1, foto 2, foto 3.

La música joropo en el Festival Colours of Ostrava

Colours of Ostrava es un festival de música multigénero que se celebra en los alrededores de Dolní Vítkovice, justo a las afueras de Ostrava, en la República Checa. Este extraordinario espacio industrial, protegido por la Unesco, acoge un cartel igual de alucinante en el que no faltan ídolos pop ni leyendas del rock, además de dejar espacio a géneros musicales más contemporáneos.

El festival tiene una especial sintonía con las bandas latinoamericanas. Esta vez lo confirmó la participación de la banda colombiana Cimarrón, formada en el año 2000 para recuperar las raíces y difundir a nivel mundial el no tan conocido género del joropo.

Según cuenta Ana Veydó, líder y cantante de la banda, el festival checo les llamaba la atención desde Colombia porque se trata de un evento impresionantemente grande. Además, la directora del festival los convocó hace unos tres años para que participaran en el evento, pero debido a temas de agenda y los obstáculos que ocasionó el covid, lograron acordar su presencia para esta edición. Tanto a ella como a los demás integrantes de la banda les dio mucha alegría  incluir a una tierra con tanta riqueza y tradición musical como Chequia en la larga lista de países a los que están haciendo llegar, poco a poco, las virtudes del joropo.

Joropo es el nombre que se ha dado a un género de música que se comparte con Venezuela, sobre todo en los llanos. Es una música que se hace con arpa, cuadro, maracas y bajo. Sin embargo, Cimarrón desde sus inicios ha ido más allá de lo local, de la región, incluyendo otros instrumentos, como el zapateo, el cajón peruano, el surdo brasilero y la tambora de la costa colombiana. Todo eso ayudó a potenciar la masa acústica de la banda, sin perder la esencia del género.

La banda fue un sueño que Ana logró hacer realidad junto a su pareja Carlos Rojas, un arpista y compositor del pueblo San Martín que formó parte de la delegación de músicos folclóricos colombianos que acompañó a Gabriel García Márquez en el evento de recepción del Premio Nobel de Literatura en Estocolmo. Con él dirigieron y trabajaron sin descanso en la banda, hasta que él falleció en el año 2020 de una afección cardíaca, dejando como legado artístico una agrupación por la que pasó una verdadera selección de músicos de la región. La banda empezó a hacerse conocida gracias a su participación en importantes festivales musicales de Malasia, Países Bajos, Escocia, Estados Unidos y Marruecos, y a sus actuaciones en prestigiosas salas culturales como la de Japón o la de Pekín. A la vez, logró ese reconocimiento por el trabajo de difusión de su líder Ana Veydó quien ha ido abriendo espacios y buscando eco por fuera de la región. A lo largo de 23 años de carrera, la apuesta escénica de Cimarrón ha cautivado a las audiencias de 41 países.

Cierta especie de distancia que tomó la banda respecto a los canales oficiales les brindó, como suele ocurrir, cierta libertad para no quedar a merced del uso político. Su propuesta ha influenciado mucho a los jóvenes porque, por ejemplo, fueron la primera banda en poner un bailador solo a zapatear, eso no existía porque tenía que ser con pareja, con mujer.

Además de colaborar con artistas de la talla de Aterciopelados, Carlos Vives y Juanes, la banda ha sido nominada a los premios Grammy en 2004 con ‘Sí, soy llanero’ como mejor álbum tradicional de músicas del mundo y al Grammy Latino en 2020 por su álbum ‘Orinoco’. En este momento están de gira por Europa, concentrados, sobre todo, en el Reino Unido.

Como agrega Ana, en los escenarios donde paran hay muy pocos latinos, los ve más bien el público de ciudades locales, y esa ha sido la manera de ir abriendo caminos para géneros que a veces son invisibilizados incluso en los mismos países donde los artistas viven. En Colombia, el joropo no es la música más conocida y del mundo menos porque si se habla de Colombia, se habla de la cumbia, del vallenato, otros géneros.

De hecho, la banda Cimarrón ha tocado más veces en el Reino Unido que en Colombia. Al mismo tiempo. Eso les ha brindado una fuerte presencia en medios ingleses tan prestigiosos como el Financial Times. Y no solo para hacer ver el joropo, sino toda una región que necesita ser visible con todos los problemas que tiene Latinoamérica, a veces con una imagen negativa. Quieren mostrar que son más de lo que han sembrado de ellos como imagen.

Cimarrón ya había actuado anteriormente en Chequia, en el festival de música del Castillo de Námest nad Oslavou en el año 2011. Por ese entonces, tenían la sensación de que los checos eran algo rígidos, y por eso les sorprendió que hubiera un público tan joven que bailara y saltara con sus canciones. Esa misma sensación se incrementó aún más luego de una inolvidable participación en Colours of Ostrava que terminó por confirmarles que el público checo es muy receptivo a otras sonoridades.

Fuente: adaptado de Radio.espanol.cz (Juan Pablo Bertazza). Foto 1-2, foto 3.

La cultura cervecera checa aspira a ser Patrimonio Cultural de la UNESCO

Los checos son los mayores consumidores de cerveza a nivel mundial y el consumo de esta bebida sigue creciendo a pesar del constante aumento de su precio. El año pasado, por ejemplo, el consumo medio de cerveza fue de unos 136 litros por persona, aunque antes del Covid era seis litros más alto por persona.

Beber cerveza en Chequia es más que una costumbre, es una tradición cultural nacional cuando se está con los amigos. Los productores de esta bebida quieren por ello que la cultura cervecera checa llegue a figurar como Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO. Presentar esa solicitud no será nada fácil, dado que no se busca inscribir sólo una determinada categoría de cerveza y su proceso de fabricación. Sería necesario tomar en cuenta también los aspectos sociales y culturales, que consiste en una forma de compartir entre las personas. A la vez, resultaría muy importante mencionar las materias primas utilizadas, así como a los maestros cerveceros. Si la Unión Checa de Fábricas de Cerveza logra reunir todos los datos a tiempo, piensa presentar la solicitud en febrero del próximo año.

Los organizadores de la propuesta pidieron apoyo en sus esfuerzos a nivel regional y lo consiguieron por el momento en Bohemia del Sur. Se espera que pronto cuenten también con el respaldo de la región de Pilsen. Especialmente la cerveza lager checa goza de una gran popularidad y renombre a nivel europeo por su alta calidad y sabor excepcional. Cada turista extranjero que visita la República Checa no pierde la oportunidad de probarla en alguna cervecería típica del país.

No obstante, debido a la pandemia de coronavirus y a la subida de los precios de los alimentos en Chequia, incluida la cerveza, su consumo se está trasladando paulatinamente desde los bares a los hogares. Mientras que en 2019 los checos consumían el 35% de la cerveza en los bares y el 65% en casa, el año pasado el 69% de la cerveza que se consumió provenía de las tiendas y en los bares se bebió sólo el 31% del total. Además, el paquete de medidas del Gobierno para reducir el déficit a partir del próximo año cuenta con incrementar el IVA a la cerveza consumida en los bares del 10% al 21%. Se espera que con ello aumente nuevamente el precio de la cerveza de barril en los restaurantes y bares, lo que podría traducirse en una nueva reducción del número de consumidores de esta bebida en los bares.

La inscripción de la cultura cervecera checa en la lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO podría revertir esos cambios y atraer a cada vez más clientes, tanto nacionales como extranjeros, a las cervecerías checas para conocerla en toda su complejidad y disfrutar de la cultura cervecera local. Cabe mencionar que en Colombia, por ahora, se puede conseguir la cerveza checa de marca Czechvar.

Fuente: Espanol.radio.cz (Ivana Vonderková). Foto 1, foto 2.

Conozcan la Biblioteca Nacional checa

Considerada una de las bibliotecas más bellas del mundo, la Biblioteca Nacional se encuentra en una de las zonas más visitadas por los turistas que llegan a la capital. Forma parte del Clementium, como se conoce el complejo de edificios ubicado a pocos pasos del Puente de Carlos, una parada obligatoria de todos los que visitan Praga. Sin embargo, en gran parte pasa inadvertido para los viajeros dado que la ruta principal que va entre el Castillo de Praga y la Plaza de la Ciudad Vieja copia un gran muro exterior del Clementinum y no llega hasta la biblioteca.

Por tal razón, los representantes de la biblioteca empezaron a cooperar con la agencia Prague City Tourism, la organización oficial de gestión turística de la capital checa, con el fin de diseñar una nueva ruta turística enfocada en la riqueza barroca del lugar. La ruta llevará a los visitantes a aquellos lugares que pueden ver solo en compañía de guías oficiales de la agencia. Los turistas descubrirán la belleza de la sala de la Biblioteca Barroca, la Torre Astronómica de casi 70 metros de altura, y la Sala Meridiana desde donde se puede observar un sofisticado sistema astronómico de la época del Renacimiento tardío.

La Biblioteca Barroca, descrita como una de las bibliotecas más hermosas del mundo, es uno de los puntos más llamativo del nuevo recorrido. Contiene más de siete millones de volúmenes, incluidos manuscritos y grabados antiguos. Entre las obras más importantes se encuentra el Códice Vyšehrad, un escrito de antes de 1085.

Otro momento interesante es el ascenso a la galería de la estación meteorológica, que empezó sus mediciones regulares en 1752 desde el observatorio que está ubicado en el Clementinum. Vale la pena también echar un vistazo a los quince relojes de sol adosados a las paredes de los patios, obra de uno de los mejores astrónomos jesuitas, Valentin Stansel. Actualmente, en el Clementinum se celebran conciertos de música de cámara, concretamente en la Sala de los Espejos. En esta sala barroca forrada de espejos se encuentran diversas pinturas y el órgano  original que tocó Mozart durante su visita a Praga en el siglo XVIII.

El objetivo de la nueva campaña es presentar el valor histórico del complejo de edificios del antiguo seminario jesuita, convertido en la más antigua y mayor biblioteca del país, sin olvidar que hasta el presente se trata de un centro utilizado por científicos y estudiantes.

Fuente: Espanol.radio.cz, DisfrutaPraga.com. Foto 1, foto 2.

Praga como galería de arte del escultor David Cerny

Así como en Praga se ofrecen recorridos temáticos sobre distintos períodos de la historia, fantasmas y cervezas, sería posible trazar un itinerario con las múltiples obras que el escultor David Cerny viene realizando, instalando y exponiendo, hace varias décadas, en diversos puntos de la ciudad. Desde su época más provocadora cuando, luego de la Revolución de Terciopelo, pintó de rosa un tanque soviético en la entrada del Jardín de los Kinský, hasta esta actualidad en la que, en protesta contra la guerra actual, pintó con los colores de Ucrania otro tanque soviético expuesto en ese mismo sitio.

A pesar de ser tan distintas entre sí, casi todas sus obras tienen la particularidad de identificar inmediatamente a su autor, gracias a un estilo propio que mezcla reflexión y una intención lúdica tan extrema que suele despertar admiración y rechazo en partes iguales. El nombre de Cerny también está circulando fuera de las fronteras de Chequia. En el extranjero se lo conoce por haber hecho de Praga una especie de galería propia: con obras que se exponen al aire libre, como los famosos bebés de la isla de Kampa, y otras bajo techo como es el caso del célebre caballo invertido del pasaje Lucerna.

Si bien hoy está considerado uno de los escultores más importantes del país, durante mucho tiempo, le desagradaba la idea de convertirse en artista. Incluso tiene formación universitaria en física y electrónica aunque, durante sus estudios se dio cuenta de que prefería hacer cosas más creativas, siguiendo los pasos de sus padres, ya que su madre era restauradora y su padre pintor. No obstante, sus padres querían que se dedicara a la ingeniería de construcción.

Lo interesante es que aquel deseo de sus padres en algún punto parece haberse cumplido ya que muchas de las obras de Cerny cuentan, justamente, con una compleja ingeniería en tanto, lejos de ser objetos estáticos, suelen abordar o incluso plasmar la idea del movimiento. Así sucede con los dos hombres orinando el territorio de República Checa, en la obra Trifot basada en una novela de ciencia ficción de John Wyndham y, sobre todo, en una de las más famosas: la cabeza giratoria de Franz Kafka, uno de los principales referentes de Cerný junto a Sigmund Freud, otro célebre judío a quien también homenajea con la estatua colgante de la calle Husova en pleno centro histórico.

La cabeza giratoria de Kafka mide once metros y pesa casi cuarenta toneladas. Lo que no se sabe tanto es que tiene una especie de hermano gemelo en Charlotte, Carolina del Norte, que se llama Metalmorfosis. Además, en apenas unos meses se va a inaugurar en Los Ángeles otra obra muy similar que en este caso remite a un genio del séptimo arte, David Lynch.

Cerny le dio a la ciudad también la existencia de Meet Factory, un espacio que él mismo fundó y dirige y se ha convertido en la usina artística más conocida de Praga. A esas construcciones emblemáticas de Praga, pronto se sumará un particular edificio en Karlín, justo enfrente de Invalidovna, que se denomina Fragment. Nuevamente, se trata de una obra monumental que, sin lugar a dudas, marcará un punto cúlmine en esa síntesis de arte e ingeniería que supone la obra de Cerný. Es que en este caso se trata directamente de un complejo de viviendas que cuenta con la presencia estelar de Lilith, una mujer gigante de 24 metros de alto y 35 toneladas que sostiene el edificio y tiene una cabeza móvil que gira a la medianoche.

Fuente: adaptado de Espanol.radio.cz (Juan Pablo Bertazza). Foto 1foto 2foto 3.

La décima edición de Signal Festival de Praga

El Signal Festival de Praga, la exhibición de luz y tecnología digital en las calles de la capital checa, cumple diez años. En esta edición ofrece el programa más amplio de toda su existencia. Los espectadores pueden disfrutarlo desde el jueves 13 hasta el domingo 16 de octubre.

“Nos encontramos en la frontera entre la cultura de galería y la diversión en los bastidores de la ciudad. El espacio público es nuestro campo de juego y nuestro escenario. Creemos en la igualdad y la accesibilidad. El arte es de todos”. Estos son los lemas del festival que desde el año 2012 llena las calles de la capital checa con proyecciones y video mapping.

Este año se presentan 14 instalaciones completamente nuevas y una proyección que se ha recuperado porque fue la más popular de la primera edición del evento. Se trata de una instalación de dos artistas canadienses llamada Cloud. Es una estatua interactiva compuesta por 6000 bombillas. Decenas de cordeles cuelgan de ella e invitan a los visitantes a que enciendan la luz y cambien el aspecto de la instalación. Cloud se puede observar en el Palacio de Vršovice, situado en una ruta nueva que los organizadores decidieron abrir especialmente para esta décima edición del Festival. El camino va desde la Basílica de Santa Ludmila, ubicada en Námestí Míru, y conecta los barrios de Vinohrady y Vršovice.

Otras novedades de este año vienen de la mano de la colaboración del festival con otras organizaciones, como, por ejemplo, el nuevo espacio de arte Kunsthalle Praga o el Centro de Arquitectura y Urbanismo (CAMP). En el CAMP hay una nueva instalación del artista turco radicado en EE.UU. Refik Anadol. El Instituto de Planeación y Desarrollo de Praga ofreció a Refik y a su estudio un conjunto enorme de datos sobre Praga y él, basándose en ellos, creó una instalación artística que se puede ver en su sede.

El Signal Festival también contará con la participación del Teatro Nacional de Praga, concretamente con los artistas de su Nueva Escena, Laterna Magica. Éstos prepararon una instalación de baile y luz que se da cada 20 minutos en el parque Katerinská.

Su participación en el evento fue confirmada también por Maxim Velcovský, uno de los diseñadores checos más destacados. Su instalación para el Festival recuerda los acontecimientos actuales en Ucrania por medio de coches quemados que el propio Velcovský trajo de la zona de conflicto. Los interesados pueden ver la instalación titulada La posibilidad física de morir en la mente de un vivo en la plaza Mariánské, frente a la Alcaldía de Praga.

Además de los mencionados artistas de Chequia, Turquía y Canadá, el festival cuenta con la participación de creadores de Japón, Francia y Hungría, cuyas piezas se pueden observar en la Biblioteca Nacional, la Iglesia de San Salvador, la Piazzeta del Teatro Nacional, la Universidad Técnica, los parques de Bezruc y Herold, la Galería de la Capilla de Belén y el observatorio astronómico de la ciudad de Praga. Además del video mapping, los visitantes pueden asistir a conferencias y talleres que tratan el tema del diseño desde distintos puntos de vista.

Fuente: Espanol.radio.cz (Martina Kutková). Foto 1, foto 2, foto 3.

Chequia entre los países más pacíficos del mundo

La República Checa está entre los 10 países más “pacíficos” del mundo, ocupando el puesto 8 entre 163 países evaluados. Así lo indica la última clasificación del Índice de Paz Global (Global Peace Index) publicado por el Instituto Británico para la Economía y la Paz (Institute for Economics and Peace). Por lo tanto, a priori se trata de un país seguro, que además ha mejorado su situación respecto al año anterior. Esta vez ha obtenido 1,318 puntos, un mejor resultado respecto al informe de 2021 cuando obtuvo 1,329 puntos estando en el puesto 9.

Este indicador mide el nivel de paz y la ausencia de violencia en un país en una escala del 1 al 5. Abarca 3 categorías y 23 indicadores en total, como los índices de delincuencia, la facilidad de acceso a las armas, el tamaño del ejército y su equipamiento, las contribuciones a las misiones de mantenimiento de la paz de la ONU, las relaciones con los países vecinos, el carácter pacífico de las manifestaciones, el grado de presión sobre los ciudadanos por parte del sistema político y la participación en conflictos extranjeros. Además de la evolución de la puntuación, es fundamental la evolución que tenga el país en el ranking que lo compara con el resto de los países.

La República Checa tiene resultados muy positivos gracias a los bajos índices de asesinatos y otros delitos violentes en el país, la relativa dificultad de acceso a las armas, el bajo nivel de presión de los políticos sobre la población y la sensación de seguridad. Por el contario, la posición del país se ve afectada de manera negativa por el nivel relativamente alto de las exportaciones de armas, el número de prisioneros per cápita, la calificación de las fuerzas de seguridad y la policía.

Desde que empezó a medirse el índice en 2008, Islandia ha sido el ganador anual. Afganistán ha estado tradicionalmente en el otro extremo de la clasificación. Colombia está situada en el puesto número 144 del ranking, lo que significa que puede considerarse un país peligroso. Obtuvo 2,729 puntos en el Índice de Paz Global, con lo que empeora levemente su puntuación respecto al informe de 2021 (2,694 puntos).

Pueden consultar el informe completo aquí: visionofhumanity.org.

Otras fuentes: Novinky.cz. Foto 1, foto 2.

La fiesta del séptimo arte se vive en Karlovy Vary

Con 170 películas en pantalla, la edición 56 del Festival Internacional de Cine de Karlovy Vary marca, al menos desde las apariencias, cierto regreso a la normalidad después de dos años de pandemia. Esta gran fiesta de cine, la más prestigiosa de la Europa Central, empezó el 1 de julio y se prolongará hasta el 9 de este mes. La primera edición del festival se celebró en 1946, siendo éste el segundo festival de cinematografía más antiguo de Europa, después del de Venecia. Las mejores películas están galardonadas con el Globo de Cristal durante la ceremonia final. El hotel Thermal de Karlovy Vary se convierte en el centro del festival, sin embargo, las proyecciones y eventos acompañantes tienen lugar en toda la ciudad balneario.

Este año se inauguró un nuevo espacio multifuncional vinculado al canal de televisión del festival donde los visitantes pueden relajarse, bailar y disfrutar de alguna bebida. Lo interesante es que las mascarillas, que casi no se ven en las salas, pasaron a las pantallas como uno de los grandes temas que aparecen en muchas de las películas en exhibición, algunas de las cuales tuvieron su estreno mundial en el festival. Otro enfoque tiene que ver, por supuesto, con la guerra en Ucrania. Al respecto, el actor, director y guionista estadounidense Liev Schreiber, que tiene raíces ucranianas por parte de su abuelo, presentó en el marco del festival la organización BlueCheck Ucrania, que colabora y asiste al país afectado por la invasión.

Las otras dos grandes estrellas de esta edición son los “oscarizados” Benicio del Toro, que este viernes pisa la alfombra roja para presentar la proyección de la película Traffic (2000), de Steven Soderbergh, y el sábado recibirá el Premio del Presidente; y Geoffrey Rush. El actor australiano, que fue el primero de esa nacionalidad en ganar el Oscar, vivió uno de los momentos más especiales del festival cuando los espectadores le cantaron el feliz cumpleaños (acaba de cumplir 71) y él respondió, agradecido y conmovido, soplando velitas imaginarias. Rush, que también presentó la proyección de Shine (1996), de Scott Hicks, tuvo mucha sintonía con el público al contar que Los miserables, uno de sus primeros trabajos, fue filmado en los estudios Barrandov de Praga. Además, se refirió a la dificultad del idioma checo, incluyendo la pronunciación de algunas palabras checas.

Entre los invitados de habla hispana, uno de los más destacados fue el español Jonás Trueba, creador de películas como Todas las canciones hablan de mí, Los ilusos y La virgen de agosto. Trueba suele trabajar con un plantel de actores fijo y, de hecho, vino a presentar su flamante film Tenéis que venir a verla, con el actor Vito Sanz y su productor Javier Lafuente (en la foto). Otra presencia destacada es la del argentino Gastón Solnicki que, si bien estudió en Argentina, también completó su formación en Nueva York y tiene una presencia cada vez más importante en los más destacados festivales internacionales.

En esta ocasión, presenta su quinto largometraje A little love package, un film entre Viena y Málaga que tiene como elemento fuerte la improvisación, cuenta con la colaboración del escritor mexicano Mario Bellatin y está inspirado, en parte, en la ley que prohíbe fumar en bares y restaurantes que, en la capital austríaca, recién se reglamentó en 2019.

En cuanto a las películas, una de las más aplaudidas y cuyo debate posterior generó más interés fue el documental The killing of a journalist (El asesinato de un periodista) del estadounidense Matt Sarnecki. Se trata de un conmovedor trabajo de investigación sobre el asesinato del periodista Ján Kuciak y su novia Martina Kušnírová, que conmocionó a la sociedad eslovaca y tuvo repercusión a nivel internacional.

El programa detallado y más información pueden encontrar en la página web del evento: kviff.com.

Fuente: Espanol.radio.cz (Juan Pablo Bertazza). Foto 1, foto 2, foto 3.

República Checa tiene el puente colgante más largo del mundo

A mediados de mayo fue inaugurada una atracción turística para los amantes de la infraestructura quienes no tienen vértigo. Se trata de un nuevo puente peatonal colgante que gracias a sus 721 metros de longitud se inscribe como el más largo del planeta. De ahí su nombre: Sky Bridge 721.

Situado en la estación de alta montaña de Dolní Morava, en el noreste de la República Checa, la nueva pasarela se eleva a 95 metros de altura del suelo y a 1 125 metros sobre el nivel del mar. Conecta dos cadenas de montañas – Orlické hory y Jeseníky – sobre el majestuoso valle del arroyo Mlýnský.

Dado que tiene unos 120 centímetros de ancho, solo está permitido el paso de peatones en caso de animarse a cruzarlo. No se admiten bicicletas, sillas de ruedas ni carritos de ni?os. Visto desde la punta, el puente parece remontar casi verticalmente. Pero es solo el efecto óptico provocado por su longitud, no se tiene que escalar nada. De hecho, su desnivel es de apenas 10 metros desde el comienzo al final gracias a un sistema de tirantes completamente seguro. Soporta 360 toneladas.

La pasarela promete vistas espectaculares de las montañas envueltas en nubes y la impresionante masa forestal que se despliega infinita hasta el límite del horizonte.

Es una experiencia electrizante, aunque un poco aterradora. Se puede cruzar, previa reserva online (aquí), todos los días de 9.00 a 20.00 horas en los meses de junio, julio y agosto. Puede pasar que algunos días las visitas se cancelarán por cuestiones de seguridad, por ejemplo, cuando los vientos alcancen los 135 km/h. El pase cuesta 14 euros y el paseo dura aproximadamente dos horas dado que acaba en un sendero interpretativo que hace más entretenida la vuelta al punto de origen. El Puente de Tiempo tiene 2 km de largo y, además de disfrutar del entorno natural, los turistas podrán sumergirse en una experiencia de realidad aumentada. Este juego educativo incluye también un videojuego interactivo y cubre temas como la protección del medio ambiente y la historia del lugar desde 1938 hasta 2022. Entre otras cosas, aparecen soldados con uniformes de la década de 1940 y algunos vehículos de esa época.

La construcción del puente, que posee una estructura con seis cuerdas principales y otras sesenta de viento, ha demandado dos años de trabajo y algo más de 8 millones de euros. Fue realizada casi exclusivamente por empresas checas de la región, utilizando componentes de origen checo. Solo las cuerdas provienen de una empresa italiana dado que fue la única en toda Europa que pudo suministrar las cuerdas de longitud y fuerza requerida.

Originalmente, el equipo no se había planteado batir ningún record, sino encontrar la forma y el tipo de puente ideal para conectar dos cumbres. La naturaleza misma fue la que fijó la longitud que se presenta hoy.

Fuentes de la administración de Dolní Morava esperan a unos 300 000 visitantes en la temporada de verano. La pasarela fue diseñada para recibir a unas 500 personas a la vez, pero en los primeros 14 días se permite a un máximo de 250 turistas en un mismo momento. La región de Dolní Morava ofrece también otras actividades invernales y veraniegas para los apasionados a los deportes de montaña y a la adrenalina. Además de senderos, pistas de esquí o circuitos de descenso de BTT, está el Sky Walk, una espectacular estructura de madera que soporta un divertido tobogán con vistas sobre estas montañas checas.

Fuentes: Viajes.NationalGeographic.com.es, Espanol.radio.cz, Xataka.com. Foto 1, foto 2, foto 3.

Nuevos requisitos para viajar a Europa

Hoy en día, a los ciudadanos colombianos solo se les exige portar un pasaporte válido para poder visitar los países del Espacio Schengen, incluyendo la República Checa. Sin embargo, desde finales de 2022, los viajeros también deberán solicitar el permiso de viaje ETIAS (por sus siglas en inglés), el nuevo Sistema de Información y Autorización de Viajes.

Este permiso de viaje fue creado por la Unión Europea para otorgar a los visitantes extranjeros la autorización de viajar, tanto por negocios como por turismo, a los 26 países europeos que hacen parte del Espacio Schengen. De acuerdo con las autoridades, ETIAS tiene como fin principal reforzar la seguridad de las fronteras europeas, pues permite identificar de manera más fácil posibles amenazas y riesgos asociados con los viajeros.

Cabe señalar que la introducción de este permiso de viaje no modificará el tránsito libre, pero sí será un requisito obligatorio de entrada a Europa. La autorización ETIAS está diseñada para viajes de corta duración que pueden llegar hasta los 90 días. Actualmente, 60 países necesitan solicitar la autorización ETIAS, entre estos están los latinoamericanos: Colombia, Argentina, Chile, México y Perú.

A la hora de tramitar este permiso de viaje creado por la Unión Europea, los solicitantes deben tener a la mano lo siguiente:

  1. Pasaporte colombiano biométrico, con una vigencia restante superior a 3 meses transcurrida la estadía prevista.
  2. Correo electrónico actual, para recibir la autorización aprobada del ETIAS.
  3. Tarjeta de débito o crédito válida para pagar la tarifa de exención de visa ETIAS.

Además, en el formulario en línea los colombianos deben completar los datos de su pasaporte, detalles de contacto y una dirección física, información sobre la salud del viajero y sus planes de viaje. La solicitud también incorpora algunas preguntas básicas de seguridad.

El proceso en línea es fácil y no requiere de más de 10 minutos. Se puede realizar a través de un teléfono inteligente, tableta o computadora personal. Se recomienda revisar cuidadosamente toda la información introducida en el formulario para evitar retrasos en el proceso. Una vez aprobada, la exención de visa europea se envía a la dirección de correo electrónico proporcionada en el registro.

Fuente: ElTiempo.com, Portafolio.co. Foto 1, foto 2.