Las noches de verano en tres ciudades checas y una eslovaca tienen una atmósfera muy especial gracias a las Fiestas Veraniegas de Shakespeare que ofrecen cada año las mejores obras de William Shakespeare, actuaciones únicas y experiencias inolvidables. Empezaron ya a finales de junio y la última función se dará el 7 de septiembre. Se trata de la exhibición de teatro al aire libre más antigua y más grande de toda Europa, enfocada en la obra del mencionado dramaturgo, poeta y actor británico.
Las presentaciones se llevan a cabo al aire libre en dos escenas en Praga, en el Castillo de Praga y a partir de 2007 también en el hermoso patio del Palacio de Lichtenstein, actual sede del Conservatorio de Música de la Academia de Arte, que se encuentra en la Plaza Malostranské. A la vez, el festival tiene lugar también en el castillo de Spilberk en Brno, la capital morava, en el castillo de Ostrava y el castillo de la capital eslovaca, Bratislava. Los grupos de teatro de estas tres últimas ciudades llegan también a la capital checa para mostrar los talentos de sus actores más importantes.
Las funciones empiezan siempre a las ocho y media de la noche, sin embargo, dado que tienen lugar al aire libre, en caso de un mal clima pueden ser canceladas. En todas las obras actúan actores famosos del país. La calidad del lenguaje utilizado es garantizada por el traductor destacado de la obra de Shakespeare al checo, Martin Hilský.
Como en los años anteriores, el público puede disfrutar de diversos dramas, tragedias y comedias. Los interesados pueden, por ejemplo, ver la adaptación moderna de la tragedia sobre el príncipe danés Hamlet. Con un reparto actoral extraordinario, la obra pone énfasis en el desempeño de los actores y los conflictos de los protagonistas, usando un lenguaje contemporáneo. Sin pretender tocar las emociones del público, esta interpretación descubre un potencial policíaco de la obra y trata de mantener en alerta la razón y el sentido de lo absurdo de los espectadores.
En el programa figura por primera vez también una de las obras menos representadas del escritor británico denominada A buen fin no hay mal principio, que inauguró el festival en Praga. Esta comedia oscura está llena de aventuras, amor y milagros, y es protagonizada por actores checos de renombre. No hacen falta ni otras obras célebres de Shakespeare como son las comedias Mucho ruido y pocas nueces, Noche de Reyes, o la obra legendaria Las alegres comadres de Windsor que se presenta ya por décimo año seguido. Otra de las opciones para entretenerse es la escenificación checo-eslovaca de La comedia de las equivocaciones. De manera muy particular se pone en escena la comedia Measure for Measure (Medida por medida) dado que es interpretada por el grupo Prague Shakespeare Company en su idioma original.
Por última vez se presentan las obras El sueño de una noche de verano, pero también la famosa tragedia de amantes de Verona, Romeo y Julieta, obra llena de imágenes poéticos que ha atraído la atención de los espectadores sobre todo por su interpretación poco usual. Un sueño romántico de los dos jóvenes se pone más serio en la segunda mitad de la presentación, y al final se convierte en una pesadilla de suspenso.
El evento surgió a principios de los años 90 bajo la iniciativa del entonces presidente checo Václav Havel con el fin de abrir el Castillo de Praga a los artistas y al público general. A partir de 1998 el festival se ha convertido en una tradición anual, y poco a poco ha crecido de manera inesperada en cuanto al número, el contenido y la calidad de las escenificaciones presentadas. De hecho, el evento goza de una popularidad enorme y repercusiones positivas tanto del público como de los expertos y medios de comunicación, por lo tanto las entradas suelen ser agotadas rápidamente.
Más información y el programa completo de las presentaciones encontrarán en la página web: www.shakespeare.cz.
Otras fuentes: KudyZnudy.cz. Foto 1, foto 2, foto 3.